Gustav Klimt.
Supongo que no sólo las pinturas y el arte en general, sino que cualquier cosa que se expone o expresa constituye al final una parte de lo que se es, está o identifica.
Es en aquellos pequeños detalles cotidianos, que parecieran carecer de significado, donde se nos reflejan varias de las facetas más reales y honestas, intrincadas y profundas.
Lo subconsciente suele superar a lo evidente y lo simbólico a lo literal. Nada es casual, y cada acto y cada hecho habla más que cualquier palabra.
La vida y las personas son bastante más complejas de lo que parecen.
Si no, miren el blog; mírenme a mí...
Sólo miren la imagen.